Esto hace pensar que otros casos más inocentes también lo son y que están dirigidas al público gay.
Os podéis imaginar cómo me he quedado al ver el siguiente anuncio de Ivory Soap (recordad que estamos hablando de principios del siglo XX).
Para quien no se haya dado cuenta, la clave está en el bate de béisbol.
No hay comentarios:
Publicar un comentario